sábado, 13 de marzo de 2010

¡Viva la Malinche!


Crítica de música / Jesús Solo de Zaldívar
Lila Downs / Ojos de culebra



Las fotos son de Daniel Pérez TC

Lugar: Teatro Cervantes, miércoles 10 de marzo de 2010
Lila Downs: voz, guitarra
Paul Cohen: clarinete, saxo
Yayo Serka: batería
Samuel Torres: percusiones
Celso Duarte: arpa, violín, charango
Carlos Henderson: bajo
Rob Curto: acordeón
Rafael Gómez: guitarras


Arropada por una buena banda de músicos de diversos países americanos, Lila Downs volvió a Málaga para presentar en el Teatro Cervantes su disco Ojos de Culebra (2008), el décimo de esta artista de madre mexicana y padre estadounidense. A pesar de evidentes problemas con el sonido - que durante la primera parte del concierto impidió entender las letras de las canciones-, Downs, desprovista de la estética Frida Kahlo que la acompañó en su anterior visita al Peñón del Cuervo, hizo disfrutar a un público entregado, que la piropeó en diversas ocasiones al grito de “Guapa” o “Viva la Malinche” y hasta un “Viva la madre que te parió”; lo que consiguió arrancarle más de una sonrisa y alguna simbólica invitación a un tequilita.



Si algo quedó claro durante el recital fue la energía que derrocha en el escenario y el potencial de su impresionante voz, que nos dejó maravillados abarcando registros muy amplios, llegando en ocasiones a sonidos imposibles y a frecuencias que los micros no llegaban a recoger en su totalidad. Danzando al ritmo de música fronteriza y rancheras, interpretó canciones de su último disco y algunas de los anteriores, alternando las propias, con versiones bastante libres de temas tradicionales como Currucucú Paloma, La cucaracha o La Llorona, aunque se echó en falta el intimismo de algunas de sus creaciones y la fusión que la caracteriza, insistiendo en la parte más folklórica de su repertorio.



Aún así, y dejando a un lado los problemas técnicos mencionados, mereció la pena el espectáculo. Hizo disfrutar al público que aplaudió con entusiasmo, especialmente cuando mencionó a Picasso, y dedicó una de sus interpretaciones a la Mari, cantante del grupo malagueño Chambao, que ha colaborado en el último disco de la mexicana.

viernes, 12 de marzo de 2010

El buen gusto de Luis de Córdoba




Crítica de Flamenco / José Antonio Triguero



Flamenco viene del sur. Recital.



Lugar: Teatro Cánovas, Miércoles 10 de marzo de 2010.
Programa doble: Jesús Méndez y Luis de Córdoba.

Jesús Mendez con la guitarra de Miguel Salado.
Luis de Córdoba con la guitarra de Manuel Silveria.

Retrospectiva: Luis de Córdoba con José Antonio Rodríguez. que abrió el ciclo el día 3 de marzo.


"Recital" es el programa doble que el ciclo "Flamenco viene del sur" ofreció en las tablas del Teatro Cánvovas el pasado 10 de marzo. El primero en comenzar fue el artista más joven, la promesa, que con aires de Cádiz y el eco poderoso de la Paquera de Jerez entró directamente "a capela" rememorando romances con un corrido andaluz que sorprendió a los espectadores por su fuerza y buen tino escénico. Y la salida de la corrida, con el pregón de Macandé.


A partir de ahí, Jesús Méndez hizo cantiñas, donde demostró dominio y buena dicción, recreándose en la potencia y la claridad de su voz, soleares y siguiriyas donde se lució con flamencura, aunque estuvo algo forzado. Terminó por bulerías y Jerez volvió a inundar el teatro de compás.  Un acierto las voces en off de los palmeros que jaleaban a compás cuando el cantaor se quedaba solo con el  guitarrista. Por Fandangos y Malagueñas -que no estaban en el programa- estuvo más frío, aunque su expresividad, porte y sus largos brazos encandilaron al público sobre todo en el guiño de cantar de pié y sin micrófono el último tercio de dichos fandangos. En cuanto a las malagueñas del Mellizo estuvo correcto aunque sin brillo. El mutis final por fiestas, con todo el cuadro acompañándole, habló del poderío de su tierra gaditana.

Después de una breve pausa, sale Luis de Córdoba medio en penumbra que se para y se planta en espera del aplauso de bienvenida. Es un gran clásico este cantaor y así lo demostró con su magisterio. Comenzó con una vidalita, un cante de ida y vuelta de origen argentino que bordó con gran sensibilidad y preciosismo. Su voz era en ocasiones la de un tiple por sus trancisiones sonoras del falsete al agudo y vuelta e comenzar. Impresiona ver cómo su cante continúa aún terminada la estrofa, tiene cola como si de una rever o un eco se tratara. 

Nos brindó una lección magistral trazando un camino entre la toná y la siguiriya. Instruido, conocedor y bregado, tocó en ese colorario, a Chacón. Fue un recorrido conducido, después de la toná, por el guitarrista Manuel Silveria de manera soberbia. Después hizo unas cantiñas muy antiguas que en su voz sonaron a mieles, incluyendo una jota por alegrías. Vinieron también una malagueña y un cante abandolao. El guitarrista es especial, no abusa de rasgueos, acompaña con trinos, arpegios, punteos y un poderoso pulgar, hace que la guitarra cante en un mano a mano con el maestro Luis de Córdoba.  

El cantaor hizo también un regalo improvisado, unas bamberas que hizo tocar a Silveria como si se tratase de un fandango libre. Más idas y vueltas por colombianas y para terminar, unos tientos tangos donde la precisión de la guitarra, el buen gusto y las excelentes cualidades del maestro quedaron al más alto nivel.

jueves, 11 de marzo de 2010

Pastora Soler sin norte



Crítica de Música / José Antonio Triguero
"Bendita locura" de Pastora Soler


Las fotos son de Daniel PérezTC
Lugar: Teatro Cervantes, Domingo 7 de marzo de 2010

Disco: Bendita Locura de Pastora Soler



Músicos: José María Cortina, piano, José Losada, guitarra y Joaquín Migallón, percusión y batería, entre otros.



Se apagan las luces y comienzan los aplausos. Pensé: ¿ya ha terminado? ¿nos podemos ir? Y luego, la puesta en escena subraya la tensión mitómana existente, al aparecer la silueta de Pastora Soler enmarcada en lila por un pequeño bastidor que la proyectaba. En la segunda canción pudimos comprobar que la sombra de Alejandro Sanz iba a sobrevolar por momentos el concierto.

Con un vestido dorado de apertura frontal para lucir pasó por la balada, la copla y la bulería, cantando "a capela" en dos ocasiones con su potente y bien timbrada voz. A base de taconazo y ya libre del vestido largo, insinúa destellos a lo Marta Sánchez, Malú o el nombrado Sanz. Hubo lugar para canciones más antiguas también, más aflamencadas y copleras en rotundo contraste con las canciones  por las que es más conocida, como "Damelo ya" que es una canción simple y directa que con arreglos de jazz y samba sonó más complicada de lo que es y más difícil de cantar a coro como ella pretendía.

La canción que más me gustó fue una canción seria que habla de las cosas que dejamos de hacer porque creemos que otras son más importantes en la vida, "La mala costumbre". Sonó mejor que en la sobrecargada orquestación del disco. En este tema se atisba algo que sale de su interior. Quizás esta tema puede ser una pista a seguir. Lo que está claro es que tal como presentó la selección de números en este concierto, sonaba a pupurrí, sin coherencia ni solidez; falta de norte por así decirlo. También sonó bien "Flor de romero" del álbum "Pastora Soler" de 2005, una canción con más autenticidad y más en su perfil.
El cambio de vestuario de rigor deparó en un modelo rojo y sexy para entonar de nuevo secuelas a lo Sanz, baladas, etc... El ciclorama también rojo reta a la exageración y echa mano de su potencia, que no modera hasta llegar al grito en la versión de "Non credere" que popularizó la gran diva italiana Mina.

La canción de Mina

 
La versión de Pastora Soler

Para continuar la noche y acompañada por abanico rojo nos encaminamos hacia la copla. "Mi Triniá", "Torre de arena" de la gran Marifé de Triana o "Y sin embargo te quiero", la zambra de Quintero, León y Quiroga, joyita coplera en la voz de Juanita Reina y de Concha Piquer, posteriormente.

Después regaló algo de flamenquito que comenzó con un solo de caja impresionante, en el que parecía querer desahogarse Joaquín Migallón. Y vaya si lo hizo, disfrutón y contundente, más que con la batería. En un alarde la iluminación trata de seguir sus contratiempos en un subrayado innecesario. Y, para el flamenco, nuevo cambio de vestuario de azul con flecos. Cantó unos tangos muy dignos y unas bulerías de la desaparecida Rocío Jurado con los asistentes de pié. Canta en el patio de butacas "a capella" y la rescata el grupo por bulerías, un regalo para los fans pero quizás demasiado atrevimiento que colmó dando unos pasitos, licencia que se puede perdonar a estas alturas del largo recital que ofreció Pastora Soler.

miércoles, 10 de marzo de 2010

Los locos de la Zaranda


Crítica de teatro / Maite Serrano
Futuros difuntos

Lugar: Teatro del Auditorio, viernes 5 de marzo de 2010
Obra: Futuros difuntos
Autor: Eusebio Calonge
Director: Paco de La Zaranda
Actores: Francisco Sánchez, Gaspar Campuzano y Enrique Bustos
Compañía: La Zaranda, en coproducción con el Théâtre Sorano de Toulouse

Las fotos de la web de la compañia
La compañía de Teatro Inestable de Andalucía la Baja volvió a emocionarnos con sus seres esperpénticos, pues como afirma Paco de la Zaranda y director de la compañía, "los personajes habitan en la conciencia de quien los contempla". Tres son las criaturas de carne y hueso que deambulan por el escenario, ¿son indigentes? ¿son locos? ¿son desahuciados? Los tres se han quedado solos en el manicomio pero esperan alguna noticia a través de un altavoz. El regente de la institución mental ha muerto y el nuevo no llega, así que deciden mandar ellos, ser sus propios médicos. Disputan por ello y se crean dos bandos.

El texto de Eusebio Calonge, que en ocasiones resultaba demasiado presente (en los cambios escenográficos por ejemplo), insiste en los mensajes cargados de elocuencia en un mundo gobernado por un sistema de locos. A pesar de ésto, la iconografía que utilizan es única por lo que su belleza visual de espejos cóncavos remedia estas pausas.
Los objetos, en el teatro de La Zaranda, están cargados de energía, como los Maximones, santos sincréticos que son venerados por los indígenas de Guatemala y que son en algunos momentos, el centro de la escena. Los cuadros están presentados mediante una atmósfera que parece que se pudiera palpar. Un proceso en el que les ha ayudado la pintura de Velázquez y el buen hacer del iluminador.

El ceceo jerezano consigue ser universal en esta nueva propuesta de profunda poética teatral. La Zaranda es una de las marcas del teatro andaluz más reconocidas y con un estilo y estética más invariable. Sus trabajos son arriesgados y transgresores desde siempre, o sea que todo el mundo sabe lo que puede esperar de sus creaciones. La última, que ya pasó por Málaga, es 'Futuros difuntos', obra que parece suponer el comienzo de un nuevo ciclo. Es por ello que a los que esperaban más de lo mismo no ha llegado a satisfacer. Por otro lado, el expresionismo oscuro y el simbolismo de subsuelo se ha tornado estridente y desolador. Pero pienso que en el fondo no han cambiado, siguen siendo La Zaranda de siempre con sus disgresiones filosóficas y el entorno escenográfico que les caracteriza.

En sus treinta años de andadura, indagan sobre la humanidad y sobre lo humano por medio de sus personajes y de las situaciones límites que forman parte de su búsqueda. Utilizan un lenguaje popular y reincidente. Con esta nueva obra, los tres actores vuelven a regalar una magnífica interpretación al plasmar lo desolador que resulta vivir en continua tensión, con afanes de gloria y poder.

En definitiva, personajes perdidos dentro de un manicomio, encerrados en un lugar del que es imposible no sólo salir sino escapar. Mozart y Bach contribuyen a la oscuridad de sus vidas, recordando ambientes religiosos y Beckett pone el viaje a ninguna parte al servicio de una exhibición interpretativa masculina y desconcertante. Sin sentido, el espectador se pierde igual que los protagonistas de esta historia sin historia, locos sin amo en busca de un orden imposible. Los gritos y las situaciones extremas sirven de catapulta para la genialidad de los actores, que no escatiman en esfuerzo vocal ni físico y buscan el humor a través de paradojas crueles y lastimeras. "Lo que sobran son locos" se insiste en repetir. Y, en este ambiente desahuciado, nada permanece en ningún sitio, nada responde al poder o a las reglas, los cuerdos están ahí, en una locura infranqueable.

martes, 9 de marzo de 2010

Tiger Lillies, smog hilarante britanico





Crítica de música / Joanna Smith y Miguel Ángel Barba
El imaginario de “The Tiger Lillies” sumergió al Echegaray en un "smog" hilarante británico



Las fotos son de Daniel Pérez/TC
Lugar: Teatro Echegaray, Sábado 06 de marzo de 2010.
Concierto: Songs of Shockheaded Peter and other Gory Verses.
Banda: The Tiger Lillies.
Intérpretes: Martyn Jacques, Adrian Huge y Adrian Stout.


Este fin de semana tuvimos la oportunidad de asistir a un, cuanto menos curioso, concierto.
El Echegaray recibía a “The Tiger Lillies”, la veterana banda británica formada por Martyn Jaques, Adrian Stout y Adrian Huge.

Quienes habíamos visto sus videos a través de Internet echamos en falta todo el universo de personajes, muñecos e imágenes que pueblan sus irredentas composiciones y que suelen suponer un buen respaldo teatral, solo vislumbrado en un par de gags interpretados por el simpático Huge, baterista del grupo, quien a lo largo de todo el espectáculo nos incitaba a no perderle de vista, pues podía sorprendernos en cualquier momento con gestos, medio disfraces, tocando la batería con artilugios o juguetes y toda suerte de resortes y recursos cómicos y escénicos.

La puesta en escena del grupo es simple y básica, con una concepción también simple de la música y del formato de grupo: una batería reducida a su mínima expresión, que más bien parecía de juguete, pero con una ejecución muy buena por parte de Adrian Huge que llegó a hacerla sonar usando como baquetas cuchillos, huesos, mazos y martillos, todos de plástico. Un contrabajo y una sierra musical (serrucho manual o electrónico) tocados por un Adrian Stout bastante correcto y versátil. Y un Martýn Jaques que alternaba el acordeón, el piano y la guitarra clásica o española de cuerpo moderno, con estética a lo “Naranja Mecánica”, transmitiendo su particular concepción del mundo a quienes pudieran entender inglés, ya que con su voz, a veces meliflua, ora desgarrada, podía despistar con su superflua dulzura musical al oyente. Sólo había que mirarle a los ojos y fijarse en su cara y podía atisbarse que algo más se estaba cociendo en el escenario y dentro de él.
Los temas muy simples y las composiciones y arreglos muy austeros, lo suficiente para acompañar la particular forma de cantar de Martyn, en falsete con algún que otro desgarro, a veces maullidos.
Si algo quedó demostrado es que con ingenio y trabajo, aún con muy poco apoyo musical, pueden conseguirse muy buenos resultados. Aunque tampoco fuera nada espectacular ni nada fuera de lo común, sí que consiguieron momentos muy interesantes, a veces muy rítmicos, potentes y otros con atmósferas muy intimistas.

Otra cosa ya son las letras, paranoicas o deprimentes en demasiadas ocasiones. Muchas personas nos planteábamos qué hubiera sido de Martyn si no se hubiera dedicado a la música. Ante el nihilismo declarado en sus letras, su exacerbada insistencia en el suicidio -rayando la apología-, su aparente misoginia (la mayoría de las escenificaciones burlescas e irónicas eran representadas con mujeres), sus constantes momentos musicales depresivos en los cuales la melodía quedaba colgada de una nota de piano mientras él se regodeaba maullante en que todo es una mierda y nada merece la pena en esta vida, su reiteración en lo negativo y en solazarse en los aspectos más oscuros de nuestras propias existencias, sus ademanes cariacontecidos y su constante apariencia contrita, sólo cabe preguntarse ¿este hombre será feliz?

Nos presentaron "Shockheaded Peter and other Gore Verses", muy endogámico, en el que destacaba por encima de todo su propia decadencia reflejada en primerísima persona. Posteriormente hicieron un repaso de repertorios anteriores. Éste, siendo groseramente irreverente en ocasiones, provocó la risa del público al retratar situaciones que en principio podían resultar ser exageradas pero que en realidad son imágenes reales, fotografías de la más cruda realidad. Su propio mundo y su particular imaginario poblado de dioses y antidioses, diablos, descerebrados, paranoias, desequilibrios mentales, etc...

El humor británico más negro, a golpe de batería que acabó siendo desmembrada entre el alborozo del público por un Huge aparentemente desatado que continuó llevando el ritmo recogiendo aquí y allá pedazos de instrumento, mereció un fuerte aplauso al final del tema de un público que abarrotaba el teatro. A la salida el trió saludaba a los espectadores en el hall, firmaban cds y hacían bromas causando la lógica alegría de sus fans. Un espectáculo sólo apto para sus seguidores incondicionales y "con conocimiento de inglés".

lunes, 8 de marzo de 2010

Teatro pop



Crítica de teatro / José Antonio Triguero




Lugar: Teatro Cánovas, sábado 6 de marzo de 2010.
Obra: Pulp.
Compañía: Niños Perdidos. 
Idea original: Isa Ramírez, Violeta Hernández y David Linde.
Texto: Isa Ramírez, Violeta Hernández, David Linde y Antonio Campos. 
Dirección: Antonio Campos. 
Intérpretes: Mari Paz Sayago, Isa Ramírez, Santiago Martínez, Manuel Rodríguez y Javi Mora. 
Composición musical: Santiago Martínez, Alejandro Rojas-Marcos, Javi Mora, Paco Campano e Isa Ramírez. 
Espacio escénico: Alfonos O'Connor. 
Vestuario: Mai Canto. 
Iluminación: David Linde.

Pulp es un divertimento pop, una propuesta lúdica y entretenida en clave cómica y musical. Son cinco los personajes que con trazas de héroes de cocinilla se enfrentan a una encerrona urdida por su propio jefe y que acaban descubriendo; han sido utilizados por un mundo de intereses que en realidad, solo necesita de ellos como fachada. Caen en la cuenta de que no son los salvadores del mundo sino meros bufones servidores del poder establecido.



Lo mejor del espectáculo son sus canciones que con pocos recursos instrumentales -ellos mismos tocan ora el teclado o la percusión ora el bajo o la guitarra eléctrica- consiguen sacarle gran partido. Momentos de lirismo, de cabaret oscuro o de comedieta infantil se suceden entre melodías dulces la mayoría. Igual partido le sacan a la poca escenografía que utilizan, unos módulos cúbicos y rectángulares con los que construyen todo un edificio de oficinas y que dan alas a la acción vitalista y desenfadada de este pieza pop del género musical.

El espíritu global de la pieza es de jugueteo, de evasión. Como cuando jugábamos a ser indios o vaqueros, o bien romanos o superhéroes en nuestra infancia. Todo este afán de solaz recreo está apoyado por la música y las luces que acompañan los movimientos de tebeo de los cinco personajes.

Dicho ésto, podemos imaginar que lo que prima es el buen humor en este montaje de "Niños perdidos"; bajo la eficaz dirección de Antonio Campos realizan un trabajo actoral de buena firma aunque con inseguridades; sobre todo en la emisión de la voz. Parece que debieran asentar mejor la buena caracterización de los personajes reafirmando la personalidad de los superhéroes que por momentos, pierden en intensidad y en verosimilitud. El ritmo de la obra tiene mucho tirón y hay que estar muy concentrados para no desentonar.


Por otro lado y por último, los apuntes transcendentes del texto sobran en este divertimento cómico. La ingenuidad que se respira da mucho juego cuando cuentan sus anécdotas pero no cuando se quieren hacer referencias críticas o de denuncia social. Aquí lo candoroso roza la bobería y además peca de inmodestia.



domingo, 7 de marzo de 2010

la bien querida ausente

Crítica de pop / José Anonio Triguero



Lugar: Salón de actos del CCP, viernes 5 de marzo de 2010.
Concierto: Romancero.
Banda: La bien querida.


La verdad es que me gusta mucho más en disco que en directo. Y no por que ella lo haga peor, sino porque en el CCP sonaron mal. No oíamos su voz cuando la banda sonaba, tampoco al guitarra que tocaba con fruición su instrumento se le oía en muchas ocasiones y él se acercaba repetidamente al monitor para poder oírse. En realidad se tuvo que conformar con ser su único oyente en muchos tramos del concierto. A ver, la forma de cantar de la cantante de "La bien querida" es monocorde y se supone que ahí reside su encanto. Sin adornos, los matices de su voz pausada te embriagan. Que alguien le diga al batería que lo más importante de todo es la voz y las letras. Parecía estar en un concierto de rock, con unos finales bruscos donde no había lugar para el reposo, la contención, el brillo de la distancia, el buen gusto del que hace gala la maqueta e incluso el disco.

Ana Fernández es una cantautora pop, pero cantautora al fin y al cabo. Está fuera de lugar la estrepitosa batería y el excesivo teclado. Con la guitarra, el bajo y su guitarra hubiera bastado. Y si quiere orquestación tendrá que cuidar más la delicadeza de los músicos. Eso deberían exigirle los fans si de verdad la aprecian.

La intervención de J de Los Planetas tampoco aportó mucho, por lo breve y porque no se le oyó; tampoco él parecía estar muy contento. La música Indy no debiera caer en cuestiones mitómanas ni buscar puestas en escena rocambolescas con continuos cambios de guitarra poco justificados, por ejemplo. Poco más da el concierto que pudimos presenciar en el CCP para comentar. Espero ver en otra ocasión a "La bien querida", cuando tenga la madurez suficiente para cuidar más su música y disponga, por supuesto, de una mejor sonirización. Miéntras, seguiré disfrutando la maqueta, de cuál sigo enamorado como tantos otros.


sábado, 6 de marzo de 2010

Técnica y poesía Flamenca


Crítica de Flamenco / José Antonio Triguero
Flamenco viene del sur. Córdoba... en el tiempo.


Lugar: Teatro Cánovas, Miércoles 3 de marzo de 2010.
Guitarra solista y dirección musical: José Antonio Rodríguez.
Segunda guitarra: Chico Gallardo.
Cante: Sebastián Ruiz.
Baile: Rosario Toledo.
Percusión: Agustín Diassera.


El ciclo "Flamenco viene del sur" de este año se inauguró con la presencia del guitarrista y concertista cordobés José Antonio Rodríguez. En su trayectoria ha contado con colaboradores excepcionales, como es el caso del coreófrago y bailaor Mario Maya que diseñó los bailes de la obra "Tiempo, amor y muerte", la segunda composición de Rodríguez; ha trabajado por encargo con el Centro Andaluz de la Danza, con la Compañía Andaluza de Danza, con el Ballet Nacional de España y ha grabado cinco discos, amén de su participación en la Bienal de 1998. Con este currículum casi académico, choca ver que ha trabajado también con Natalia Oreiro y con Alejandro Sanz además de colaborar en bandas sonoras de películas como "Lola" o "El corazón de la tierra".

Entre lo prolijo y lo intimista, sus seguidores aman sobre todo la naturaleza de concertista flamenco reconocido en esas lides como "maestro". En el ciclo que nos ocupa vuelve a reencontrarse para ofrecerse bien acompañado en el cante y en el baile.

“Córdoba... en el tiempo” es una creación poética y ese lirismo le viene como anillo al dedo para incluir en el recital “Guad El Kebir” y “Manhattan de la frontera”, composiciones con las que abre y cierra su actuación. Así queda perfilado un sereno y sentido homenaje a su tierra, Córdoba.

Comenzando por el arabesco del río Guadalquivir continuó por "A Cobitos", en honra a Manuel Celestino Cobos, una taranta que bebe de los cantes que Luis de Córdoba, que también estará en el Teatro Cánovas, adoptó de "Cobitos". Y siguió por la senda de dar gloria -con el zapateado "A Soler" a su amigo ya desaparecido Manuel Soler, multi-instumentista y flamenco del baile, la guitarra y la percusión. Luego vendrían los jaleos de "Por la ribera del tiempo", "Guadalcázar"con el recuerdo de Fernando Terremoto, la bulería, precedida de cartegenera, de "Arcano" y la magistral composición "Paisaje", entre el tango y la rumba.

Detrás mío estaban Vanesa Martín -estará pronto en el Teatro Cervantes- a quien José Antonio Rodríguez le dedicó un tema- y una de las cantantes de Las Mestizzas. La formación de guitarra acopañante, percusión, cante y baile intensificaba el carácter intimista del concierto, una suerte que poco o nada tiene que ver con la actividad orquestal y otras colaboraciones más ligeras a las que Rodríguez también se entrega.

La iluminación cenital y a contraluz desde el suelo cedían todo el protagonismo a la guitarra, a los arpegios, al sonido limpio, al tempo, el silencio... El guitarrista no se recrea en el ritmo sino en la contención. Es el "sinatra" de la guitarra flamenca.

La bailaora Rosario Toledo es por momentos hiératica, ritual, otras juguetona, describe volutas con las manos y los brazos, tiene buenas transiciones con el zapateado y remata con fuerza y brío las salidas.

Hubo lugar para la sobriedad, para las crisálidas en sus solos. El agua siempre presente con notas cristalinas, magia rompiente, acentos, pellizcos, suspensión, caracoleos, escalas, golpes y pulgar. Se recrea en la dificultad, se ve que es un músico muy técnico. Prioriza la medida, la melodía y técnica que pone al servicio del rítmo y finaliza con regusto aflamencado. Es un virtuoso aunque busca el acento.

La taranta de "A cobitos" pedía una voz. En los lances de la guitarra parecía querer entrar el cante de Luis de Córdoba.

En "A soler", Rodríguez puso más nervio, tocando a dúo con el otro guitarra que acompaña o hace una segunda melodía en una escala más baja. Él pone más de relieve los agudos aunque sus repiqueteos no dejan de ser melódicos.

Cuando se unen cantaor, percusión y la bailaora sale con chalequillo torero, interpreta con los gestos, con la mirada, los silencios, se oye su taconeo con algún acompañamiento sonoro percusivo, cuanto taconea no interpreta y sus desplantes al final del baile son tórridos.

En la pose flamenca adornada de algún ademán que quiere ser contemporáneo, el grupo sigue sus giros de ballet con sabor flamenco. Cuando para tiene muchos gestos de calidad, sostiene en su quietud el compás. La voz de Sebastián Cruz es flamenca pero con un toque moderno, cálida pero con colores y dinámica.

Valga la redundancia en "Paisaje" Rodríguez dibuja paisajes con sus notas, pellizca con todo el cuerpo la guitarra hasta hacerla hablar de lugares, espacios que el alma comparte con la belleza que se muestra en los parajes por donde la melodía pisa. Describe historias más allá de la palabra, las cuerdas elaboran una proyección abstracta que llega hasta el final rebotando historias que se conocen y no se reconocen más que en el sabor de la melodía y los trinos de cada arpegio. Narrativa descriptiva que termina en soleá por bulerías con el apoyo de palmas y percusión.

Sin embargo la devoción técnica le hace ser muy exigente, lo pasa mal cuando la guitarra no responde y así lo reconoció con respecto a "Arcano". Ya se sabe que la guitarra es muy compleja pero su brillo y poder de evocación suple cualquier dificultad. Aliarse con ella es el mejor remedio.

Vivimos un alarde de dominio instrumental, una muestra de sus recursos como compositor e intérprete, muy bien arropado por todo el grupo y remataron la faena con "Manhattan de la frontera" en la que la Toledo, la bailaora saca un traje mantón que no le favorecía por sus flecos que no dejaban apreciar su cuerpo en movimiento ni sus contoneos. Tampoco el rictus dramático que empleó aportaba mucho; mejor cuando sonreía. Terminado este lance, todos de pié a la primera.


viernes, 5 de marzo de 2010

Febrero, ese loco bajito

Crónica de José Antonio Triguero

El jardín japonés. Las fotos son de Daniel Pérez TC

La red de blogs de "mi yo espectador" sigue adelante modelándose por el camino, sobre la marcha. A los cuatro espacios que dedicamos nuestro tiempo en enero, Teatro Cánovas, sala Gades, Teatro Cervantes y Teatro Echegaray, se han sumado el CCP y el Teatro del Auditorio de Diputación y ya hemos tocado el Ateneo, la sala Eventual, el CAC y el MMIMA. El paso siguiente es el Museo Picasso y su sala, que se estrena con los títeres de María Parrato el domingo 14 de marzo, y el Festival de Cine.

El Teatro Echegaray, en el que comenzamos nuestra andadura el 2 de enero pasado, continúa con su programación para niños en pleno centro de la ciudad. Sigo asistiendo a todas las funciones los domingos y, a partir del día 21 Jesús Solo de Zaldívar me ayudará en la tarea; seremos testigos de la buenísima respuesta que los espectadores pequeños tienen con su teatro. Los medios siguen sin prestar demasiada atención y durante este febrerillo el loco, la prensa convencional sigue sin atender a esta programación dirigida a "los locos bajitos", que diría Gloria Fuertes. Ocurre igual con la de la Sala Gades. Pero nosotros a los nuestro, así que vamos a hacer un repaso de los cuatro espectáculos que pudimos ver el pasado mes de ese loco bajito llamado febrero.

El Teatro Echegaray está situado en el número 13 de la céntrica calle del mismo nombre. Los domingos ofrece espectáculos para niños en funciones de 11 y 13 horas. Padres y niños llenan el teatro en un ritual al que Málaga se está acostumbrando para ver teatro, musicales, ópera, magia y algo de danza y titeres, que son los contenidos principales que se ofrecen.

7 de febrero "El flautista Mágico" de Teatro Paraíso.
Adaptación del clásico ‘El flautista de Hamelin’ con influencias evidentes de Michel Ende llevó esta obra a la la Ópera. La música como valor expandido, da lugar a una flauta transmutada en otros instrumentos, acordeones y saxo. Como todo el mundo sab,e Hamelin sufre una colonización ratuna por un pacto oscuro que el alcalde hizo con el señor del raterío. Las autoridades son cómplices de esta invasión a causa del dinero, cosa que invita a reflexionar sobre lo actual del cuento. El poder corrompe cuando el afán de enriquecerse desplaza el interés común. Y puestos a buscar soluciones, la hija del alcalde encuentra a un flautista que con su instrumento mágico ayudará al pueblo de Hamelín, sobre todo a los más pequeños. Solucionado el asunto una rata quedará encerrada en una jaula para servir de ejemplo en esta historia con sabor de leyenda.

En la versión de Teatro Paraíso se cambia el final y los niños no desaparecen sino que son los que solucionan el problema, con lo cuál la crueldad del cuento primitivo queda tamizada en pos de una visión más esperanzadora y positiva en el que no pagan justos por pecadores. Si alguien puede mejorar el mundo son los niños, lastima que se hagan mayores.

14 de febrero El jardín japonés de Teatro di Piazza o d'Occasione.
Ha sido la pieza destacada de este mes de febrero. Alejados del teatro dependiente del texto han logrado mediante la tecnología, unir la tradición de contar cuentos con una experiencia vivida por los espectadores a pié de escenario. Actúan encima de un tapiz que cambia su forma y sonido por la interacción del movimiento de quien lo pisa. Quedará en el recuerdo de mucho niños esta vivencia. La obra participó en el XXVII Festival de Teatro de Málaga, además de integrarse en la programación matinal de los domingos del Echegaray. Este mes ha sido la obra que merecido una crítica en "mi yo espectador". El mes de enero fué para "¿Por qué lloras Marie?". Además podéis leer una entrevista a las integrantes de "El jardín japonés".




21 de febrero Un soldadito de plomo de Arden Producciones.
"Un soldadito de plomo" ha sido el primer texto para niños de Arden Producciones, una compañía valenciana con quince años de historia. Es una una versión de la obra de Hans Cristian Andersen que nos presenta a dos niños, Hugo y Mía. Dado que el primero sufre cojera y la segunda está gorda, sus amigos se burlan de ellos. El encuentro entre los dos niños es el eje para abordar la historia del soldadito de plomo y será el punto de unión de un viaje interior, que los dos niños emprenden para descubrir todo su potencial y la valentía que esconden dentro de ellos; así podrán enfrentarse a los miedos y a la incomprensión. Una lección para mostrar que se pueden vencer todos los límites, si nos lo proponemos.

28 de febrero El truco de Olej de Bosquimanos Koyac. Teatro de Muñecos de Uruguay.
El truco de Olej es un espectáculo que sorprende por los títeres, la técnica utilizada y la combinación de diferentes tamaños en las figuras que utilizan. La estética en la utilización de la luz negra es impactante, cosa que les permite desmembrar el cuerpo de algún títere y emplear objetos en una conjunción de magia y juego. Sin embargo la estructura es más bien simple, repetitiva; y éso, unido a que la luz negra a partir de un rato debilita la atención de los espectadores, hace que la sorpresa se vaya perdiendo por el camino. De tal modo que cuando al final nos muestran bajo luz de escenario cómo manipulan algunas de sus criaturas, resulta más interesante que cuando la oscuridad y la luz negra sobre los cuerpos y materiales fosforescentes, tratan de convencernos de que objetos y figuras se mueven solos.

Y para el mes de marzo, el Echegaray presenta 3 espectáculos más, Einstein, Yayos y Popota La Pilota. También les seguiremos la pista en una próxima entrega.



jueves, 4 de marzo de 2010

Topic es Amor al Titere




"Me he quedado con la boca abierta, el Topic es algo especial". El pasado miércoles 3 de marzo, el Diario Vasco recogía este titular entresacado de una entrevista a Cristina Santolaria, Subdirectora General de Teatro del Inaem con motivo de la visita que realizó el día anterior al Centro Internacional del Títere de Tolosa al que no ha dudado en calificar como único en toda Europa. Dicho interviú firmado por Roberto Herrero presenta a esta aragonesa, profesora especializada en Filología Española y antigua directora del Teatro Albéniz de Madrid y responsable del Centro de Documentación Teatral, impactada por lo que había podido ver en el Topic.

Se puede considerar la elocuente reacción de la Subdirectora como un espaldarazo y un merecido reconocimiento a la labor que se desarrolla en Tolosa desde hace muchos años en torno al mundo del títere.

"Títeres y Tolosa ya van a quedar indisolublemente unidos" reconoce en la entrevista que publica el diario de Euskadi. Impresionada por la propia estructura del museo y por las colecciones de títeres, tanto que no duda en resaltarlo sobre el Museo del Teatro de Almagro. El ministerio de Cultura y el de Fomento han apostado por el Topic y se compromete a seguir haciéndolo desde el Inaem y la Dirección General de Industrias Culturales.

También señala que "es un buen motivo para venir a Tolosa" por lo que podemos deducir que el Topic además de cambiar la imagen que se tiene del títere, puede contribuir en la Industria Cultural y en la Turística.


El Topic

El Topic es un museo moderno en el que además está el Centro de Documentración de Títeres de Tolosa, dispone de Teatro y otras infraestructuras que lo convierten en una especie de Casa de la Cultura del arte del   títere.

El Topic es el Centro Internacional del Títere de Tolosa y surge como un centro integral para el arte de la marioneta en toda Europa.


El Topic nace con una filosofía participativa y está disponible para todos los que tengan como objetivo promover, desarrollar, promocionar y perfeccionar el arte del títere.

El Topic es tradición, vanguardia e interrelación con las otras artes.

El Topic es miembro de la Unión Internacional de la Marioneta, UNIMA.

El Topic tiene 3.600 m2.

Idoia Otegui y Miguel Arreche son los responsables del Topic y los que han trazado un largo recorrido que los ha llevado hasta aquí, premio a la constancia y a la calidad.



miércoles, 3 de marzo de 2010

Cádiz sin trama


Crítica de Zarzuela / José Antonio Triguero
Cádiz en concierto

Las fotos son de Daniel Pérez T C

Lugar: Teatro Cervantes, Domingo 28 de febrero de 2010.
Obra: Cádiz, versión para concierto.
Autores: F. Chueca y J. Valverde
Libreto: Javier de Burgos.
Intérpretes: Isabel Rey (Curra), José Bros (El Rubio), José Julián Frontal (Lorenzo/Don Cleto), Ana Ibarra (Una negrita/Una mamá), Luis Pacetti (Un negrito), Luis Álvarez (Un ciego), María del Alba Moreno (Señorita 1ª), Sonia García (Señorita 2ª), Antonio Jerez (Oficial inglés 1º), Matías Merino (Oficial inglés 2º),
Coro de Ópera de Málaga. Orquesta Filarmónica de Málaga.
Director del coro de ópera: Francisco Heredia.
Director musical: Lorenzo Ramos.

El protagonismo del coro superó las carencias de unos solistas que vinieron, en general, a tratar de cantar bien o muy bien como es el caso de José Bros pero que no se implicaron en convencernos de que estábamos oyendo una zarzuela. Si no llega a ser por la orquesta y la formación coral, bien dirigida por Francisco Heredia con apuntes interpretativos y con una presencia contundente en todo el concierto, hubiera jurado que no se trataba de Cádiz sino de Oslo.

Sin trama, sin los diálogos irónicos, el formato concierto dejó un sabor de boca raro, como de cuadros inconexos. Una hora y algo fue más que suficiente con unos solistas que o no querían o no estaban motivados, con la excepción de los brillantes Luis Alvarez y la excelsa Ana Ibarra. Encomiable y honesta la breve actuación de las dos sopranos del coro de la Ópera María del Alba Moreno y Sonia García que nos hicieron disfrutar junto con Ibarra de los mejores momentos del recital.

La Zarzuela Cádiz utiliza mucho el coro, coro que representa al pueblo abnegado y valiente; un pueblo cuyo único miedo es su arrojo, a sabiendas de que todo estaba perdido. Y no defraudó el brillo musical de la masa coral y su intervención interpretativa fue el único hilo conductor a nivel escénico. Miéntras, la mayoría de los solistas miraban la partitura.

La disposición espacial tampoco ayudó mucho, las cuerdas tapando a los vientos, la percusión por allí en medio, semioculta y estorbando, Y los solistas entrando y saliendo por los palcos ciegos de la platea, adaptada para la ocasión. Cada intervención dramatúrgia era de agradecer pero todos esos detalles clamaban por una puesta en escena. Sin hilo conductor, asistimos a una zarzuela descafeinada en el que, para más inri, las voces de los cantantes quedaban tapadas en muchas ocasiones por el brío de la orquesta y el coro. Sobre todo en el caso de Isabel Rey, cuya potencia más bien escasa quedó patente.

El dúo que Luis Pacetti hizo con la soprano Ana Ibarra, cuya presencia y disposición regaló la mejor actuación de la noche, fue lo más lucido a nivel vocal. Y Luis Alvarez quien con mejor espíritu azarzuelado interpretó su papel, de ciego; sus guiños al coro y que cantara de memoria señaló el camino de lo que hubiera sido un buen concierto de Zarzuela digno de celebrar el día de Andalucía.

martes, 2 de marzo de 2010

Actuación de José Antonio Rodríguez



Mañana 3 de Marzo José Antonio Rodríguez presenta en el Teatro Cánovas de Málaga "Córdoba… en el tiempo" dentro del programa "Flamenco viene del sur" de la Agencia Andaluza para el Desarrollo del Flamenco

Intérprete y profesor, José Antonio Rodríguez es uno de los referentes en música flamenca que inicia su carrera con la obra "Guajira para guitarra flamenca y orquesta" estrenada en 1987, a la que siguieron "Tiempo, amor y muerte" con coreografiada de Mario Maya–, "Viento de Libertad" o «El Jaleo», un encargo del Centro Andaluz de Danza. Su magisterio queda plasmado con la grabación de cinco discos en solitario, entre los que destacan "Manhattan de la Frontera", presentado en la Bienal de Sevilla de 1998.

Ha colaborado con diversos artistas, como Esperanza Fernández o Natalia Oreiro, y ha girado acompañando a Alejandro Sanz como artista invitado en la gira "No es lo mismo" Es un compositor pluridisciplinar, creador de la música original del ballet "Carmen" con coreografía de Aída Gómez; también de "La Leyenda", estrenada por la Compañía Andaluza de Danza en la Bienal de Sevilla o "Tiempo", del Ballet Nacional de España. Ha tocado el cine como colaborador de las bandas sonoras de las películas "Lola" y "El Corazón de la Tierra". Pero todo ello, no le hace abandonar los conciertos.

lunes, 1 de marzo de 2010

El canto lirico en el horizonte


Tribuna crítica sobre canto / Pedro Barrientos

El canto lirico en el horizonte
Unas clases magistrales y un concierto



Horizonte

Coincido con el pensamiento que apunta a que una voz cantada aporta información sobre los entresijos más íntimos del ser humano que la produce.

Por eso debe ser que dé tanto pudor a veces mostrar el canto.

Hablar sobre canto lírico no es fácil y mucho menos del panorama actual en general.

La voz , aunque debiendo ser tratada en su estudio con la misma disciplina o más que cualquier otro instrumento musical, recibe el primer mal trato desde la mente que la posee, creando grandes acotaciones desde que se descubre que es aparentemente fácil modelar melodías y expresividades que surgen espontáneas . Este es el primer tropiezo que da el cantante y el oyente, que prejuzgan infinidad de premisas que a largo plazo se estrellan contra una realidad bien diferente.
Se escucha una voz bella con aptitudes, e inmediatamente se piensa o dice: ¡Que bien canta! En esta trampa,  aseguro, que caen hasta músicos experimentados.