miércoles, 16 de marzo de 2011

Un espectáculo poliédrico

Talento Pan-genérico


11 y 12 de Marzo

ABSURDO MA NON TROPPO
Teatro de Malta

Dramaturgia y dirección Marta Torres
Con Carlos Álvarez “Jano”, Delfín Caset y Roma Calderón
Coreografía Roma Calderón


Absurdo ma non troppo no puede calificarse como una obra de teatro, quizá tampoco como un musical. Lo más probable  es que lo clasifiquemos dentro del genero del clown, con salpicaduras de mimo e incluso algunos estarán tentados de resaltar aquellos aspectos más cercanos al cabaret. ¿Nos atrevemos a incluir alguna esencia circense? Y, si bien es cierto que pueden apreciarse los livianos resquicios de todas y cada una de estas disciplinas artísticas, siendo certeros no podríamos encuadrarlo en ninguna de ellas o bien podríamos hacerlo dentro de todas. Y yo me pregunto: ¿para que necesitamos etiquetar o encuadrar algo necesariamente en alguna disciplina o género? Con lo bien que se encuentra un espectáculo de estas características nadando entre diferentes aguas, a la deriva entre todo y asomando a cada momento, en cada mutis o en diferentes gags las distintas influencias que Teatro de Malta ha derramado en este montaje.


Yo no voy a ser menos que nadie y voy a referirme a otro aspecto que me llamó la atención y que representa otro nuevo encuadre del espectáculo: el Cómic. Las tiras, casi siempre cómicas, de las que se compone este compendio pan-genérico, nos muestran a verdaderos “dibus” en escena. Jano, Delfín y Roma logran armar personajes dibujados de sí mismos en los que se desatan múltiples pasiones, de lo más humanas, pero no por eso siempre positivas: envidia, competitividad, lujuria, ternura... Se desmelenan, realizan toda una terapia en forma de potentes ritmos y movimientos constantes en escena, sostienen y tocan complejos artilugios multi instrumentales de difícil sostén y molesta ejecución, siempre con una sonrisa dibujada en sus rostros. No se podría decir tras asistir a este espectáculo que ninguno de ellos ejecutara temas complejos, ni demostraran virtuosas aptitudes musicalmente hablando, pero lo que nadie puede negarles es que son capaces de hacer música de y con cualquier cosa, que tienen un grandísimo sentido del ritmo y una enorme adaptabilidad a cuerdas, viento, percusión, teclas... y finalmente, que nos demuestran lo simple que es transmitir la esencia musical con muy poco cuando se tiene talento. Bueno, y con muchas horas de trabajo y ensayo.

Ayuda enormemente en toda esta labor coral el gran trabajo de los luthiers, consiguiendo en algunos casos artilugios sonoros muy interesantes y mostrando una gran habilidad y maestría en sus montajes, caso de los golpeadores táctiles "zapatap" que a través de cables e impulsos eléctricos disparan unas bolas de madera instaladas en patines. Igualmente podríamos decir de las adaptaciones musicales, sumamente ingeniosas en algunas de las interpretaciones o consiguiendo bellas atmósferas en otros, como en el caso de la versión de Lucy in the Sky with Diamonds.


Si quieres saber de qué va: mejor que te lo cuenten ellos.



A lo largo de la hora y poco que duró pudimos identificar cada uno de los pasajes musicales con espectáculos y montajes anteriores de otras compañías pero en ningún caso, ninguna de dichas compañías lograron reunir todas en una y además hacerlo bien, con frescura, vitalidad e inteligencia, conseguir que el publico se divierta, se admire, acompañe los ritmos y se marche con una sonrisa de oreja a oreja.

Enhorabuena por el gran trabajo de todos. 


¿A que tiene un cierto aire...?


No hay comentarios:

Publicar un comentario